Arnautovic ha decidido escribir un nuevo final justo cuando su segunda aventura con el Inter parecía destinada a concluir, para los nerazzurri, con muchos remordimientos y cero satisfacciones.
Dos años de contrato más una opción para el tercero. En el Inter se arriesgaron a traer de vuelta a Marko a Milán a los 33 años, después de una temporada agridulce en el Bolonia por un problema en el pie, pero una vez resuelto, fueron varios problemas de naturaleza muscular los que lo limitaron durante su tiempo en el Inter.
Una decepción tras otra, actuaciones que no estuvieron a la altura y una actitud que lo hacía parecer indolente a los ojos de un San Siro que ya parecía haberlo descartado definitivamente. La cuenta atrás hacia la despedida había comenzado, también con una gran dosis de alivio por parte de quienes habitualmente ocupan los asientos del Meazza, que se esperaban todo menos el giro inesperado. Como en muchas buenas novelas, en un cierto punto del relato, la figura que había permanecido al margen de la historia decide que ha llegado el momento de tomar el protagonismo. Y así ha sido más o menos para Arnautovic.
INVERSIÓN EN U – El austriaco siempre ha sido una columna vertebral del vestuario, querido y apoyado por todos sus compañeros, que le reconocen liderazgo dentro de un grupo consolidado. Los datos muestran bien el significativo cambio en el rendimiento: seis goles marcados por Arnautovic en los últimos seis partidos en los que ha sido titular (contra el Cagliari gol y asistencia). Increíble si pensamos que su botín había permanecido en cero durante los primeros 23 partidos de liga. Una eternidad, aunque a decir verdad en la Serie A nunca había tenido la oportunidad de poder jugar como titular antes de que el Inter se metiera en este calendario loco. Y justo ahora que Inzaghi lo necesita, Arnautovic está respondiendo presente, al contrario de Taremi, que en cambio ha desaparecido en el momento de mayor necesidad.
ARNA ESPERA – He aquí por qué en Milán, desde hace algunas semanas, circulan rumores sobre una posible reconfirmación de Arnautovic, lo que sería sorprendente por cómo parecía que se habían puesto las cosas. El proyecto de Oaktree está dirigido a los jóvenes, pero si Inzaghi insistiera en la petición de tener 5 delanteros para la próxima temporada, no es de descartar que el austriaco pueda tener otra oportunidad. Por el momento todavía es un poco pronto para hablar de ello, pero desde fuentes cercanas a la directiva se filtra que el jugador ya ha comunicado que le gustaría seguir un año más y jugar el Mundial de Clubes, obviamente revisando sus emolumentos a la baja. Desde las oficinas del Inter por ahora evaden el tema, evidentemente la cuestión no es tan sencilla, pero al menos en este momento, teniendo que elegir uno entre Arnautovic y Taremi, la preferencia recaería en el austriaco, tanto para los directivos como para el entrenador. Quién lo habría dicho… Pero el fútbol está lleno de finales sorpresa.