La leyenda del fútbol italiano, Roberto Baggio, confesó recientemente la profunda desesperación que sintió tras fallar su penalti decisivo en la final del Mundial de 1994 contra Brasil. En una entrevista reciente con The Athletic, donde también reflexionó sobre su vida después de retirarse, Baggio habló sobre aquel doloroso momento.
La Desesperación de Baggio Tras el Infame Penalti de 1994
Baggio se adelantó para lanzar su penalti después de que Franco Baresi y Daniele Massaro ya hubieran fallado sus intentos. Aunque a Brasil todavía le quedaba un lanzamiento, el fallo de Baggio sentenció la suerte de Italia en Pasadena.
Este error crucial dejó a Baggio completamente devastado. “Si hubiera tenido un cuchillo en ese momento, me habría apuñalado,” admitió.
Continuando su reflexión sobre aquel momento, declaró: “Si hubiera tenido una pistola, me habría pegado un tiro. En ese momento, quería morir. Así fue.”
El Impacto del Calor en el Mundial de 1994
Baggio también destacó cómo las condiciones extremas afectaron el desarrollo del torneo. “Todo el Mundial, no solo nuestros partidos, se vio afectado por el calor. Era alucinante”, explicó.
A pesar de las difíciles condiciones, señaló la resiliencia del equipo: “Tuvimos que esforzarnos más allá de los límites de lo humanamente posible para poder jugar. Pero a pesar de todo, nos impulsaba la pasión y el deseo de lograr resultados, y muchos italianos que vivían allí como inmigrantes estaban orgullosos de nosotros. Lo sentimos como un equipo. Fue un empuje extra para superar los obstáculos.”