La Primeira Liga portuguesa se prepara para alzar el telón de su temporada 2025/26, y el primer acto ya promete un choque de narrativas. En el Estadio Municipal de Rio Maior, el modesto Casa Pia recibirá al todopoderoso Sporting CP, flamante campeón nacional. Pero si alguien espera una rendición incondicional del equipo local, el técnico João Pereira ya se ha encargado de disipar esas ilusiones con una mezcla de humildad y una ambición muy particular.
Humildad con Trajes de Protagonista
João Pereira, al frente de los `gansos` por segunda temporada consecutiva, parece haber adoptado una filosofía de vida y de fútbol que bien podría resumirse en: “Con los pies en la tierra, pero la mirada en las estrellas”. En la conferencia de prensa previa al esperado encuentro, el estratega fue claro al trazar la línea entre el respeto y el temor.
“El Sporting es campeón nacional, reflejo de todo el trabajo de la temporada pasada, pero eso ya está en el museo, es historia. Hicimos una pretemporada estable y nada mejor que cruzarnos con el Sporting para empezar, porque eso nos da la posibilidad de trascendernos. Nada mejor que tener ya este estímulo.”
Una declaración que, si bien reconoce la jerarquía del rival, también sienta las bases de lo que Casa Pia aspira a ser: un equipo que no se esconde. El concepto de “protagonista” no solo se limita a la posesión del balón o a la ofensiva desmedida; se refiere a la capacidad de influir en el juego, de imponer su idea, incluso frente a un gigante. Es la ambición del David que, sin negar la fuerza de Goliat, se niega a ser un mero espectador de su propia derrota.
El Campeón y la Sombra del Pasado
El pasado, dicen, es un país extranjero. Y para João Pereira, el campeonato del Sporting de la temporada anterior reside firmemente en el museo. Una forma elegante de recordarnos que en el fútbol, cada partido es un lienzo en blanco. “En el fútbol no se vive de historia y conquistas pasadas. Mañana [viernes] será un partido de igual a igual”, sentenció el técnico. Una dosis de realismo pragmático que desarma cualquier excusa previa.
La salida de Gyökeres, uno de los pilares del Sporting, es un tema de conversación en el fútbol portugués. Sin embargo, para Pereira, este detalle es, cuanto menos, anecdótico. Confía plenamente en que el nuevo técnico del Sporting, Rui Borges, encontrará las soluciones necesarias para suplir la ausencia del sueco. Esta perspectiva es un movimiento táctico discursivo: lejos de enfocarse en las debilidades del oponente, Casa Pia prefiere centrarse en sus propias fortalezas y en la ejecución de su plan. Una suerte de “anti-drama”, donde las bajas ajenas no son motivo de distracción.
Estrategia Flexible y Foco Interno
Uno de los aspectos más interesantes de la visión de Pereira es su aparente indiferencia ante el esquema táctico que Sporting pueda presentar. Línea de tres, línea de cuatro… el Casa Pia parece tener un antídoto para cada configuración.
“Miramos más hacia nosotros y tenemos que saber defender líneas de tres y de cuatro. Sabremos lo que tenemos que hacer, presente el Sporting lo que presente. Estamos preparados para todos los escenarios.”
Esto no es una muestra de desinterés, sino de una confianza férrea en el trabajo propio. Es la esencia de un equipo que ha trabajado su adaptabilidad durante la pretemporada y que busca ser reactivo y proactivo a la vez, sin depender de la “sorpresa” del rival. Una declaración de principios que habla de madurez táctica y mentalidad de equipo.
Objetivos Clares: La Permanencia y Más Allá
Como es natural para un equipo con el perfil del Casa Pia, la permanencia en la máxima categoría es el primer objetivo, ese dulce mantra para muchos recién llegados o equipos de presupuesto modesto. Pero una vez asegurada esa meta, João Pereira ya tiene la mirada puesta en ir más allá.
“Entramos con la misma mentalidad de la temporada pasada. Es un equipo joven, queremos potenciar jugadores y afianzar la imagen del Casa Pia. En el plano deportivo, tenemos los pies bien asentados en la tierra: el objetivo principal es la permanencia y, en segundo plano, hacerlo mejor que la temporada pasada, que ya fue la mejor época de siempre.”
Es una hoja de ruta clara: consolidar la presencia en la élite del fútbol portugués, desarrollar talento joven y, de paso, seguir escribiendo las páginas más gloriosas de la historia del club. La temporada pasada fue histórica, y el desafío ahora es superar esa marca. Una ambición que, lejos de ser desmedida, se presenta como el siguiente paso lógico en la evolución del club.
El Escenario está Listo
El balón rodará el viernes a las 20:15 en el Estádio Municipal de Rio Maior, bajo la atenta mirada de Gustavo Correia, el árbitro designado. Será el pistoletazo de salida para una temporada que promete emociones, y el Casa Pia de João Pereira ha dejado claro que, aunque se enfrente al campeón, no tiene intención de ser un mero comparsa. La historia, de momento, espera para ser escrita.