En la última década, el Tottenham ha contado con grandes jugadores como Harry Kane, Son Heung-min y Gareth Bale. Este último se convirtió en una verdadera estrella antes de fichar por el Real Madrid en 2013 por una cifra récord.
Tras la salida de Bale, surgió un joven jugador que generó grandes expectativas: Andros Townsend. El extremo inglés fue comparado con Bale y se pensó que podría convertirse en su sucesor en el equipo.
Sin embargo, la carrera de Townsend tomó un rumbo muy diferente. Aunque logró establecerse en la Premier League, nunca alcanzó el nivel estelar de Bale. Tras pasar por varios equipos ingleses, actualmente juega en Turquía para el Antalyaspor, donde tampoco está teniendo mucho éxito.
A sus 33 años, Townsend solo ha marcado un gol en 11 partidos con su nuevo equipo turco. Lejos quedaron aquellas comparaciones con Bale y las expectativas de convertirse en una estrella del Tottenham y la selección inglesa.
La historia de Townsend demuestra lo difícil que es cumplir con las altas expectativas cuando se es comparado con un jugador de elite como Bale. Aunque tuvo una carrera respetable, nunca pudo acercarse al nivel del galés ni convertirse en el nuevo referente de los Spurs.