Uli Hoeneß, figura emblemática y presidente de honor del FC Bayern Múnich, es conocido por no morderse la lengua. Y recientemente, ha vuelto a hacerlo, esta vez abordando un tema que toca a uno de los grandes iconos del club y del fútbol alemán: Thomas Müller.
La posibilidad de que Müller, un jugador sinónimo del Bayern, pudiera buscar un nuevo horizonte fuera de Baviera, específicamente en la Major League Soccer (MLS) de Estados Unidos y, según rumores, en el LA Galaxy, sirvió de excusa para que Hoeneß expusiera su particular visión del asunto en una reciente entrevista.
Y para sorpresa (o no) de muchos, la perspectiva de ver a Müller en el fútbol estadounidense no le genera precisamente entusiasmo. De hecho, su opinión fue, como mínimo, contundente y teñida de cierto sarcasmo. Preguntado sobre si el LA Galaxy sería un buen destino para el “Müller de la nación”, Hoeneß fue tajante.
Según sus propias palabras, le transmitió a Müller su opinión directa: “Le dije que sería mejor para él dejarlo [retirarse por completo]”. Aunque, añadió con un matiz que suena más a permiso resignado que a bendición: “Pero si de verdad quiere hacerlo, debería hacerlo”.
La razón de su desdén parece clara: la percepción del nivel competitivo de la liga norteamericana. Hoeneß no oculta su falta de interés, a pesar de reconocer que la MLS “ha mejorado gracias a los grandes fichajes”. Para él, la comparación es casi un insulto: “Si has jugado en el Bayern Múnich y luego te vas a Los Ángeles… simplemente no es el mismo nivel”. Utilizó, incluso, una expresión irónica y despectiva al referirse a un posible movimiento a California como no pertenecer a la “clase Californication”.
En esencia, la postura de Hoeneß es la de un guardián de la elite futbolística. Ver a un campeón del mundo y múltiple ganador de la Bundesliga y la Champions League terminar su carrera en una liga que considera de “menor categoría” le parece un paso atrás innecesario, sugiriendo que colgar las botas manteniendo el estatus de leyenda del Bayern sería una decisión más digna.
Así, mientras el futuro de Thomas Müller sigue siendo tema de debate, la opinión de Uli Hoeneß añade una capa de drama y, por qué no, de humor involuntario, a la conversación. Un recordatorio de que, para algunos puristas, hay clubes y ligas que simplemente no están a la altura de la gloria bávara.