Ousmane Dembélé, el extremo francés del Paris Saint-Germain, está reescribiendo su historia en el fútbol profesional. Conocido anteriormente por sus momentos polémicos y lesiones frecuentes, Dembélé ha dado un giro a su carrera desde su llegada al PSG.
En su segunda temporada en París, Dembélé se ha convertido en una pieza clave del ataque del equipo. Su desempeño destacado contra su ex club, el Barcelona, en la Champions League, marcó un punto de inflexión en su trayectoria. Anotó goles cruciales en ambos partidos de cuartos de final, demostrando su valía en los momentos importantes.
A nivel doméstico, Dembélé lidera la tabla de asistencias en la Ligue 1 por segundo año consecutivo. Además, ha mejorado su eficacia goleadora, igualando en media temporada su segunda mejor marca de goles en una campaña completa.
Su evolución también se refleja en la selección francesa. Después de un periodo de bajo rendimiento, Dembélé brilló en la Eurocopa 2024 y ha vuelto a marcar con Les Bleus. Su nuevo papel como referente ofensivo, tanto en el PSG como en la selección, sugiere una madurez creciente en su juego.
Aunque aún muestra destellos de inconsistencia, como su expulsión contra el Bayern Munich en Champions League, Dembélé parece estar en camino de convertirse en el jugador de élite que su talento siempre prometió. El desafío ahora es mantener este nivel y consolidarse como uno de los mejores extremos del mundo.