La temporada del Ipswich Town ha sido una montaña rusa, con grandes victorias como las obtenidas contra el Tottenham y el Wolverhampton, pero también dolorosas derrotas en la Premier League.
El equipo de Kieran McKenna fue goleado 4-0 por el Newcastle United en su último partido, exponiendo las debilidades defensivas del Ipswich. Esto ha llevado a cuestionar algunas de las contrataciones realizadas por el club, especialmente en la zona defensiva.
Una de ellas es Ben Johnson, quien llegó con gran expectativa procedente del West Ham United. McKenna lo elogió como una “excelente” adición al equipo tras lograr el ascenso. Sin embargo, el rendimiento de Johnson no ha estado a la altura de lo esperado.
A pesar de su experiencia en la Premier League con el West Ham, Johnson solo ha sido titular en 5 partidos de liga con el Ipswich. Sus estadísticas tampoco han sido destacadas en comparación con otros defensores del equipo.
Si Johnson no logra establecerse pronto en el once titular y mejorar su rendimiento, corre el riesgo de convertirse en un fichaje olvidable para el Ipswich. El club podría arrepentirse de haber contratado a un jugador que cobra £30,000 semanales y que no ha logrado ganarse un puesto en el equipo.
El Ipswich necesita que Johnson recupere el nivel que mostró en el West Ham, cuando fue catalogado como un jugador “fabuloso” por David Moyes. De lo contrario, su fichaje podría quedar como un error costoso para el club recién ascendido a la Premier League.