Goodison Park, un estadio con más historias que muchos libros, es testigo de un renacer. La temporada 2025/26 ha comenzado para el Everton con un aire de optimismo que no se sentía desde hace tiempo. Bajo la experimentada batuta de David Moyes, el equipo ha demostrado una resiliencia y un espíritu combativo que son la firma del técnico escocés. ¿Será este el inicio de una nueva era gloriosa para los Toffees?
La Resurrección de un Gigante Durmiente
Actualmente en la 8ª posición de la tabla con once puntos, fruto de tres victorias, el Everton está demostrando que las ambiciones, tanto en la Premier League como en Europa, no son un sueño, sino una meta. Las victorias contra equipos como el Wolves y el Brighton, sumadas a una dramática remontada ante el Crystal Palace —que puso fin a una racha invicta de 19 partidos de las `Águilas`—, no solo suman puntos, sino que inyectan una confianza vital en el vestuario. Incluso la ajustada derrota contra el Liverpool, el gigante vecino, sirvió para recordar que este Everton compite de tú a tú, incluso contra los más fuertes. Es un equipo que ha aprendido a morder, y a morder fuerte.
Este resurgimiento colectivo encuentra sus raíces en historias individuales de superación. Varios jugadores están redescubriendo su mejor forma o prosperando en nuevos roles, convirtiéndose en pilares fundamentales para la mejora del equipo.
Jack Grealish: El Fénix que Vuela de Azul
Pocos jugadores encarnan este renacer del Everton como Jack Grealish. A sus 30 años, este delantero ha revitalizado su carrera desde su llegada a Goodison Park. Tras una etapa en el Manchester City marcada por las lesiones —se perdió 17 partidos en dos temporadas por problemas de cadera e ingle, una minucia para quien levantó un triplete, dirán algunos con sorna— Grealish ha encontrado un ritmo y una continuidad bajo las órdenes de Moyes que parecían perdidos en el banco de los suplentes de un gigante.
Con 557 minutos en siete partidos de Premier League, un gol y cuatro asistencias, Grealish ya se acerca a sus mejores números anteriores. Su influencia es innegable: ¿quién podría olvidar su gol de la victoria en el minuto 93 contra el Crystal Palace? Ese tanto no solo aseguró una remontada épica, sino que catapultó al Everton en la tabla.
La fe depositada por Moyes en Grealish ha dado sus frutos, y el jugador, disfrutando de minutos y responsabilidades, ha captado incluso la atención del seleccionador inglés, Thomas Tuchel, quien ha subrayado la importancia del fútbol regular para la consideración en la Copa del Mundo. Las estadísticas hablan por sí solas, recordándonos su impacto en su temporada más exitosa (la del triplete 2022/23), donde promedió:
- 6.27 conducciones progresivas por 90 minutos.
- 4.39 pases progresivos por 90 minutos.
- 113.3 metros de distancia de pase progresivo por 90 minutos.
- 84.1% de pases completados.
- 4.55 acciones de creación de tiros por 90 minutos.
- 1.97 regates exitosos por 90 minutos.
- 42 conducciones por 90 minutos, con 33.9 toques en el tercio de ataque.
Estos números reflejan no solo su creatividad, sino también su habilidad para influir constantemente en el juego, consolidando su valor en el proyecto de Moyes. Grealish se ha convertido en sinónimo del resurgimiento del Everton, su habilidad técnica, visión y liderazgo marcan el estándar para otros en la plantilla, como su «heredero aparente» Tyler Dibling. Su reinvención en azul sirve como un modelo a seguir para jugadores más jóvenes o aquellos que buscan un nuevo aire en Goodison Park.

Kiernan Dewsbury-Hall: El Motor Silencioso del Centro del Campo
Otro jugador que sigue una senda similar es Kiernan Dewsbury-Hall, el mediocampista central de 27 años que llegó al Everton desde el Chelsea con un contrato de cinco años y un valor de 28 millones de libras. En Stamford Bridge, su papel fue secundario, apareciendo principalmente como suplente y en partidos de la Conference League, aunque sí tuvo el honor de participar en la final de la Copa Mundial de Clubes contra el PSG. Un currículum curioso para un «jugador de rotación», ¿verdad?
En el Everton, ha asumido un rol mucho más central, jugando siete partidos en todas las competiciones esta temporada, anotando un gol y proporcionando una asistencia. Descrito como una «revelación» en el King Power por Brendan Rodgers en el pasado, Dewsbury-Hall está teniendo un impacto similar, funcionando como un engranaje altamente efectivo en la máquina de Moyes.
Agresivo en los duelos, hábil para leer el juego y seguro en la posesión, Dewsbury-Hall combina la responsabilidad defensiva con una impresionante capacidad para llevar el balón. Sus estadísticas confirman su valía:
Kiernan Dewsbury-Hall – 2025/26 | |
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Partidos Jugados | 6 |
Goles | 1 |
Asistencias | 1 |
Conducciones Progresivas | 10 |
Pases Progresivos | 34 |
Fuente: FBref (estadísticas de temporada, no por 90) |
Además, se sitúa en el percentil 74 en pases completados (80.4%), en el percentil 82 en pases progresivos por 90 minutos (5.46), en el percentil 87 en entradas por 90 minutos (1.90), y en el percentil 98 en despejes por 90 minutos (1.54). Su capacidad para recuperar balones y luego avanzar con ellos, refleja una influencia similar a la de Grealish, aunque en una zona del campo diferente.
Mientras Grealish aporta creatividad y goles, Dewsbury-Hall contribuye con estabilidad, agresividad e inteligencia en el mediocampo. Cubre terreno, lee bien el juego y toma decisiones siempre positivas con el balón. Al igual que Grealish, está redescubriendo su forma e impacto, lo que subraya la notable capacidad de Moyes para rejuvenecer a jugadores que podrían haberse estancado en otros clubes. Si mantiene esta trayectoria, Dewsbury-Hall podría convertirse en una figura central en el mediocampo del Everton, tal como Grealish lo es en el ataque.

David Moyes: El Arquitecto de un Sueño Azul
El impacto de David Moyes en el Everton no es solo táctico, sino también psicológico. Su habilidad para infundir resiliencia y su ojo clínico para detectar y potenciar el talento oculto son evidentes. No es un mero entrenador; es un restaurador de carreras, un estratega que entiende que el fútbol, más allá de los números, se construye con confianza y oportunidad. Su visión ha permitido que jugadores como Grealish y Dewsbury-Hall no solo recuperen su forma, sino que la superen, convirtiéndose en catalizadores de un equipo con hambre de gloria.
¿Un Futuro Brillante en Goodison Park?
La temporada 2025/26 apenas está comenzando, pero las señales son prometedoras. El Everton, con su mezcla de estrellas revitalizadas y jóvenes promesas, parece estar forjando una identidad que le permitirá competir con los grandes. Las aspiraciones europeas, antes un lejano espejismo, ahora parecen una posibilidad tangible. La química entre Moyes y sus jugadores, el deseo de superación y la calidad individual que emerge, pintan un futuro de color azul intenso para Goodison Park. Si logran mantener esta inercia, el Everton podría no solo sorprender a muchos, sino también escribir un nuevo y emocionante capítulo en su rica historia.
Y quién sabe, quizás, en un par de años, estemos hablando de un Tyler Dibling siguiendo los pasos de Grealish, consolidando así el legado de David Moyes como el hombre que no solo reconstruyó un equipo, sino que les devolvió el alma.