La situación de la Juventus antes del partido contra el Verona es paradójica. A pesar de que en enero la distancia a la cima de la tabla llegó a ser de 16 puntos, una victoria contra el Hellas podría acercarlos a solo 6 puntos del Inter, líder actual, 5 del Napoli y 3 del Atalanta. Además, se acerca el enfrentamiento directo con el equipo de Gasperini.
LOS EMPATES, ¡QUÉ LÁSTIMA! La situación actual de la Juventus es paradójica por dos razones. Primero, la posición actual aumenta el lamento por los numerosos empates (13 en total) en esta temporada. Aunque algunos empates pueden considerarse puntos ganados, muchos otros se sintieron más como derrotas.
Por ejemplo, el 2-2 contra la Fiorentina, un partido que la Juventus merecía ganar, el 1-1 contra el Lecce con un gol encajado en el minuto 93, y el 1-1 contra el Torino en el derbi. Si se sumaran esos 6 puntos “perdidos”, la clasificación de la Juventus sería muy diferente.
CLIMA SURREALISTA Y PROTESTAS Por otro lado, la Juventus vive la previa de un partido que podría acercarlos inesperadamente a la lucha por el Scudetto en un ambiente de tensión y protestas que no se veía en Turín desde hace años.
La eliminación de la Copa Italia ante el Empoli ha generado varios frentes: uno interno, entre directiva, entrenador y equipo, tras las declaraciones de Thiago Motta; otro enfocado en el mercado de fichajes y posibles sustitutos de Motta si no se logra la clasificación a la Champions League; y finalmente, la protesta de los hinchas. Mientras el equipo puede reabrir la lucha por el Scudetto y suma cuatro victorias consecutivas en liga, los ultras critican a la directiva, al entrenador y a los jugadores, enfocándose en la eliminación de la Copa Italia y la Champions League.
A pesar de la controversia, la Juventus ve renacer la posibilidad de luchar por el Scudetto.
Antonio Conte, tras el empate 1-1 de su Napoli contra el Inter, declaró: “La Juve también está al acecho”. Pero en Turín, ¿quién realmente lo cree?