La situación de Douglas Luiz en la Juventus se ha vuelto cada vez más compleja. El centrocampista brasileño, fichado por una suma considerable del Aston Villa, ha estado ausente en once partidos esta temporada debido a lesiones y dificultades de adaptación.
Thiago Motta, el entrenador de la Juventus, maneja la situación con diplomacia, sugiriendo que las exclusiones de Luiz se deben a la necesidad de alcanzar una condición física óptima. Sin embargo, hay indicios de que factores económicos también juegan un papel importante.
Con un costo de transferencia de 48,7 millones de euros y un salario bruto anual de 9,25 millones, la Juventus se enfrenta a un dilema financiero. Una venta prematura podría resultar en una pérdida significativa, mientras que un préstamo podría devaluar aún más la inversión.
Mientras tanto, Motta ha encontrado soluciones alternativas en el mediocampo con jugadores como Kephren Thuram, Locatelli y McKennie. Esto ha hecho que la ausencia de Luiz sea menos notoria en el campo, pero más problemática desde una perspectiva financiera.
A pesar de los rumores sobre el deseo de Luiz de relanzar su carrera en la segunda mitad de la temporada, la realidad es que cualquier decisión sobre su futuro estará fuertemente influenciada por consideraciones económicas. La Juventus necesita recuperar al menos 38,96 millones de euros para evitar una minusvalía.
En resumen, el caso de Douglas Luiz se ha convertido en un enigma complejo para la Juventus, donde las aspiraciones deportivas chocan con la realidad financiera del club.