El pasado viernes, 4 de julio, el mundo del fútbol español recibió una noticia que, para algunos, cayó como un jarro de agua fría: Nico Williams, el talentoso extremo del Athletic Club, sellaba su continuidad en Bilbao firmando una extensión de contrato hasta el 30 de junio de 2030. Un movimiento importante para el club vasco, pero uno que, según parece, pilló a contrapié a otro de los grandes interesados: el FC Barcelona.
Durante semanas, e incluso meses, el nombre de Nico Williams había sonado con fuerza en los pasillos del Spotify Camp Nou. Se hablaba abiertamente del interés azulgrana en activar la cláusula de rescisión del joven atacante para reforzar su flanco de ataque. Los rumores y las informaciones apuntaban a que el Barça veía en Williams una pieza clave para el futuro, un jugador con desborde, velocidad y potencial de sobra para encajar en su esquema.
Sin embargo, la confirmación de la renovación con el Athletic parece haber llegado a las oficinas culés de una manera… poco ortodoxa. Según reportes, el FC Barcelona se habría enterado de la decisión de Williams de seguir vistiendo la camiseta rojiblanca directamente a través del comunicado oficial emitido por el club de Ibaigane. Sí, justo como el resto de los aficionados o medios de comunicación. Es cierto que en el Barça ya existía una “sospecha” de que la operación podía complicarse, pero la confirmación de este modo tan… inesperado, parece haber causado cierto revuelo interno.
Y la reacción, si se confirma lo que diversas fuentes señalan, ha sido drástica y, quizás, un tanto pasional. La información que circula apunta a que esta forma de enterarse y, sobre todo, la decisión final del jugador de no esperar o al menos no comunicar de forma directa sus intenciones al club catalán, ha provocado que las “puertas del Barcelona” se hayan “cerrado para siempre” para Nico Williams. Una declaración contundente que, en el volátil mundo del fútbol, siempre hay que tomar con una pizca de escepticismo, pero que refleja el aparente enfado o decepción en la entidad barcelonista.
Nico Williams llegó al Athletic Club en 2021 y desde entonces se ha consolidado como una figura clave y uno de los jugadores más prometedores de La Liga y de la Selección Española. Su decisión de extender su vínculo con el club que le dio la oportunidad es, deportivamente, una gran noticia para el Athletic y sus aficionados. Para el Barcelona, significa tener que descartar una opción prioritaria y, quizás, replantear su estrategia en el mercado para esa posición. La “sorpresa” en la Ciudad Condal por la noticia de su renovación subraya la naturaleza, a veces caótica, del mercado de fichajes, donde la comunicación (o la falta de ella) puede cambiar el rumbo de una operación en cuestión de minutos… o de un comunicado oficial.