Marcin Bulka, el joven portero polaco, ha recorrido un camino largo y difícil hasta convertirse en una de las figuras más destacadas de la Ligue 1. Después de pasar desapercibido en Chelsea y PSG, Bulka encontró su oportunidad en el OGC Niza, donde finalmente pudo demostrar su valía.
Bulka dejó Chelsea en busca de más oportunidades, pero en PSG se enfrentó a una competencia feroz. Su traslado a Niza inicialmente no le garantizó la titularidad, pero la llegada del entrenador Francesco Farioli cambió su suerte. Farioli le dio la confianza necesaria y Bulka respondió con actuaciones sobresalientes.
En la temporada 2022-2023, Bulka se consolidó como uno de los mejores porteros de Europa. Mantuvo 17 porterías a cero en la Ligue 1, la mayor cantidad del campeonato, y tuvo un porcentaje de paradas del 77,1%, el cuarto mejor de la liga francesa y el noveno en las cinco grandes ligas europeas.
Esta temporada, Bulka continúa impresionando. Ha realizado la mayor cantidad de paradas en la Ligue 1 (63) y tiene el segundo mejor porcentaje de paradas (79%). Además, destaca por su habilidad con los pies, siendo el décimo en la liga en distancia de pases progresivos.
Sin embargo, el futuro de Bulka en Niza es incierto. Con su contrato expirando al final de la próxima temporada y habiendo rechazado una oferta de renovación, muchos especulan sobre su próximo destino. Lo que está claro es que Bulka ha demostrado ser capaz de ser el portero titular en un equipo de élite europeo.
Para Chelsea, Bulka representa el talento que dejaron escapar. Mientras el club londinense ha tenido problemas para encontrar un portero confiable desde la partida de Bulka en 2019, el polaco se ha convertido en uno de los guardametas más prometedores de Europa. Sin duda, Marcin Bulka es el número uno que Chelsea dejó ir.