El Gimnàstic de Tarragona ha tomado una medida sin precedentes al presentar una demanda judicial contra el árbitro Eder Mallo Fernández. Esta acción legal se deriva del polémico partido de playoff de ascenso a Segunda División entre el Nàstic y el Málaga, disputado en junio de 2024.
El club catalán alega que tiene pruebas de que el árbitro favoreció intencionadamente al Málaga para asegurar su propio ascenso como árbitro de Segunda División, lo que habría quintuplicado su salario anual. La demanda incluye conversaciones grabadas entre el árbitro y un investigador privado contratado por el Nàstic.
Además, el Nàstic acusa a Mallo Fernández de falsear el acta del partido, afirmando que temió por su integridad física. El club sostiene que el gol tardío del Málaga, que frustró sus aspiraciones de ascenso, fue resultado de decisiones arbitrales premeditadas.
Esta acción legal marca un hito en el fútbol español, siendo la primera vez que un club presenta una demanda formal contra un árbitro. El Nàstic ha anunciado una rueda de prensa para proporcionar más detalles sobre el caso.
La comunidad futbolística observa con atención el desarrollo de este caso sin precedentes, que podría tener importantes implicaciones para el arbitraje en el fútbol español.