Tras una breve aventura en el fútbol saudí, el experimentado delantero Pierre-Emerick Aubameyang ha regresado a Marsella, y su entusiasmo es tan contagioso como sus carreras en el campo. Este no es un fichaje más; es una declaración de intenciones del Olympique de Marsella y una reafirmación del apetito insaciable de un goleador. ¿Qué significa su vuelta para las aspiraciones del club, especialmente en la Champions League?
El Viaje de Ida y Vuelta: Una Decisión Sin Fisuras
A sus 36 años (o casi, un detalle menor para un atleta de su calibre, ¿verdad?), Aubameyang ha demostrado que su mente sigue tan aguda como sus reflejos. La decisión de volver al OM, club que conoce bien, no fue fruto de la improvisación. De hecho, las semillas de este retorno se sembraron ya en enero, en una conversación con el nuevo director deportivo, Mehdi Benatia. «Había visto la mayor parte de la temporada del Marsella y simplemente quería ser parte de ese equipo», reveló el gabonés.
La facilidad con la que se concretó la operación habla volúmenes. No hubo necesidad de grandes discursos ni de largas negociaciones para convencer al delantero. Cuando un jugador de su talla muestra tal disposición, es porque ve algo más allá del contrato: un proyecto, una pasión, o quizá, esa “sed de revancha” de la que tanto habla.
La Magia de De Zerbi: Un Iman para el Talento
Si bien la conexión con la directiva fue clave, la voz que quizás pesó más en la balanza fue la del nuevo estratega marsellés, Roberto De Zerbi. El técnico italiano, conocido por su revolucionario “De Zerbi-ball”, ya había intentado retener a Aubameyang en el pasado. Ahora, esa deuda pendiente ha sido saldada. La conversación entre ambos, cargada de camaradería y algo de “burla”, según Aubameyang, selló el acuerdo.
«Hablamos, claro. Él no quería que me fuera la última vez, así que me ha estado bromeando desde entonces. La idea ahora es aportar mi experiencia y jugar al fútbol. Soy alguien flexible.»
La llegada de De Zerbi, con sus ideas audaces y su enfoque táctico innovador, es vista por Aubameyang como un catalizador para el progreso del club. No es solo un cambio de entrenador, sino una evolución estructural, un “buen paso adelante” para el Marsella. Y en ese nuevo orden, Aubameyang, con su experiencia y versatilidad, encaja a la perfección. Una simbiosis que promete ser tan estética como efectiva.
Arabia Saudita: Un Capítulo Sin Arrepentimientos, Pero con Aprendizaje
Su fugaz paso por el fútbol saudí podría verse como una “desviación” en una carrera de élite, pero Aubameyang no muestra ni una pizca de arrepentimiento. Al contrario, lo ve como una etapa de crecimiento. Asegura que progresó técnicamente, que ayudó a su equipo y que incluso jugó en una innovadora dupla de ataque. ¿Y la velocidad? «Todavía está ahí», afirma, con una seguridad que invita a creerle.
Quizás, esa breve estancia lejos de los focos europeos le dio la perspectiva necesaria para valorar aún más la intensidad y el desafío del fútbol de alto nivel, y la pasión vibrante de la afición marsellesa. A veces, para apreciar el regreso a casa, uno necesita tomar un desvío inesperado.
La Champions League: Una Ambición “Sin Límites”
El verdadero plato fuerte para Aubameyang y el OM es, sin duda, la próxima participación en la Champions League. Y aquí, el delantero no se anda con medias tintas: «Si queremos competir con los mejores, tenemos que darnos los medios, que es lo que el club está haciendo este verano». Su mentalidad es clara y ambiciosa: «No me pongo límites». Es una declaración que resuena con la historia y el espíritu combativo del Olympique.
Esta edición de la Champions no es solo una competición; es una oportunidad para resarcirse. La eliminación en la Coupe de France la temporada pasada, sumada a la dolorosa salida en semifinales de la Europa League 2023-2024 contra la Atalanta, han dejado una “sensación de venganza” palpable en el delantero. Y esa motivación, combinada con su talento y experiencia, podría ser el ingrediente secreto que el Marsella necesita para soñar en grande en Europa. Aubameyang, a fin de cuentas, ha saboreado la gloria europea con otros gigantes; sabe lo que se necesita para llegar lejos. Y ahora, quiere que el OM lo experimente también.
Un Futuro Prometedor para el OM
El regreso de Pierre-Emerick Aubameyang al Olympique de Marsella no es solo un traspaso de jugadores; es un mensaje. Un mensaje de ambición, de confianza en un nuevo proyecto bajo la tutela de Roberto De Zerbi, y de un deseo inquebrantable de competir en la élite. Con un goleador de su calibre y una mentalidad de “no límites”, el Marsella se posiciona como un contendiente a tener muy en cuenta. La temporada apenas comienza, pero el aroma a grandes cosas ya se siente en el Stade Vélodrome.