Los aficionados del Inter estallaron en vítores tras el rápido gol de Marcus Thuram contra el Feyenoord, el primer ruido significativo en un San Siro inusualmente silencioso. Los ultras nerazzurri estaban llevando a cabo una protesta silenciosa en respuesta a los altos precios de las entradas.
El partido de vuelta de los octavos de final de la Champions League comenzó en un ambiente surrealista, con la Curva Nord optando por el silencio en lugar de su habitual apoyo bullicioso.
Su ausencia se notó de inmediato, permitiendo que la afición visitante del Feyenoord dominara el ambiente sonoro con cánticos ensordecedores, haciendo que San Siro se sintiera momentáneamente como un campo ajeno para los locales.

Protesta silenciosa en San Siro: Los ultras del Inter se niegan a cantar en los primeros 20 minutos contra el Feyenoord
Según informes, la protesta había comenzado horas antes del inicio del partido, con una pancarta mostrada fuera del estadio que apuntaba directamente a la política de precios del club. El mensaje, dirigido a la directiva del Nerazzurri, decía:
“’El fútbol pertenece a los aficionados’, la mentira de siempre. Sesenta y cinco euros reflejan vuestra vergüenza.”
Afortunadamente para el equipo de Simone Inzaghi, la demostración solo duró 20 minutos. Cuando la Curva Nord reanudó sus cánticos, la atmósfera del estadio se transformó, restaurando el intimidante ambiente que durante mucho tiempo ha convertido a San Siro en una fortaleza en las noches europeas.