El partido entre Lazio e Inter, correspondiente a la jornada 16 de la Serie A, fue dirigido por el árbitro Daniele Chiffi. El encuentro estuvo marcado por varias decisiones controvertidas que influyeron en el desarrollo del juego.
A los 44 minutos, Bisseck recibió una tarjeta amarilla por empujar a Zaccagni antes de un córner a favor del Inter. Sin embargo, el momento más polémico llegó en el minuto 40, cuando se anuló un gol al Inter, pero posteriormente se les concedió un penalti tras la revisión del VAR.
De Vrij había marcado tras un rechace de Provedel a un disparo de Dumfries, pero Chiffi anuló el tanto por fuera de juego de Lautaro Martínez. No obstante, el VAR detectó una mano de Gigot en el cabezazo previo de Dumfries. Tras revisar la jugada, el árbitro señaló penalti para el Inter, lo que provocó las protestas de Rovella, quien fue amonestado.
Anteriormente, en el minuto 31, Bastoni vio la tarjeta amarilla por detener un contraataque de Isaksen mediante una clara sujeción. Calhanoglu también fue amonestado en el minuto 24 por una entrada con la pierna alta sobre Rovella, decisión que el Inter consideró excesiva.
En el minuto 15, Gila cometió una falta para detener un contragolpe de Mkhitaryan, acción que pudo haber sido sancionada con tarjeta amarilla.